Lo que creemos

Una comprensión firme de quiénes somos, de quién somos y lo que nos motiva es la clave para una relación sólida con el Señor. Conózcanos, vea cómo nos basamos en las Escrituras para nuestra doctrina y familiarícese con esta impresionante familia de la iglesia.


  • Dios el Padre, Jesús el Hijo y el Espíritu Santo son partes co-iguales de la gran tri-unidad de Dios (los tres en uno).
    Juan 17:21-22

  • El sacrificio perfecto de Jesús en el Calvario proporcionó cobertura, limpieza y perdón de pecados a todos los que lo recibieran.
    Hebreos 2:14-17; 2 Corintios 5:17; 1 Corintios 6:9-11.

  • Esa salvación (liberación, perdón, sanidad, redención, nuevo nacimiento y poder para vivir) se encuentran solo a través de la fe en Jesucristo.
    Efesios 2:8-9; 1 Corintios 5:17,21; Romanos 6:23; Colosenses 1:13

  • Las Escrituras son inspiradas por Dios y son útiles para redargüir, corregir e instruir en justicia. Su palabra es nuestra guía infalible en todos los ámbitos de la vida.
    2 Timoteo 3:16-17; Salmo 119:105

  • El bautismo en agua sigue al nuevo nacimiento como un acto de obediencia a Cristo y una demostración de morir a su vieja naturaleza (carnal) y resucitar a un nuevo hombre (como Cristo).
    Romanos 6:3-12; Mateo 28:19

  • El bautismo (continuación de la llenura) del Espíritu Santo para empoderar al creyente para dar testimonio al mundo perdido y moribundo (separado de Dios). También creemos en la evidencia acompañante de nuevas lenguas después de esta experiencia.
    Judas 20; Hechos 2:4; Mateo 3:11

  • La iglesia es la manifestación del cuerpo de Cristo y que se está convirtiendo en un poderoso ejército para vencer al adversario el diablo.
    Mateo 16:18-19; Hechos 26:15-18; 2 Corintios 10:3-5

  • La adoración es esencial para la continuación de la vida del creyente y debe ser una prioridad. En la adoración somos libres de bailar, alabar, orar, levantar nuestras manos o manifestarnos de cualquier manera consistente con la obra del Espíritu Santo.
    Salmo 150; Juan 4:23

  • La oración es la piedra fundamental de nuestra fe y crecimiento. Andar por fe y no por vista y agradar a Dios, requiere que escuchemos Su voz y tomemos autoridad en la tierra.
    Filipenses 4:6; Hechos 4:31; Mateo 16:10; Mateo 6:9-15

  • Que Cristo es nuestro Sanador y pondremos las manos sobre los enfermos y se recuperarán.
    Marcos 16:15-20; 1 Pedro 2:24

  • El ministerio quíntuple de apóstol, profeta evangelista, pastor y maestro son dones a la iglesia para equipar a los santos para la obra del servicio.
    Efesios 4:11-12

  • Cada miembro del cuerpo de Cristo tiene dones y encuentra plenitud en el funcionamiento de su don y llamado. Estos dones son dados por Dios y ungidos por el Espíritu Santo en la vida de los cristianos obedientes.
    1 Corintios 12:1, 6:11; Romanos 12:3-8
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